Pasar al contenido principal

Más oportunidades que riesgos: la inteligencia artificial y los medios de información

Image
Chat GPT
Fuente: Pexels

08 de Mayo de 2023

Desde el auge de productos de inteligencia artificial como Chat GPT cada vez son más los directores de medios y periodistas que se preguntan sobre el impacto que podría tener esta tecnología en su negocio. 

Por este motivo, Teemu Henriksson, investigador de WAN-IFRA, conversó con Ezra Eeman, Director de Cambio de la empresa belga de medios Mediahuis para comprender las posibles oportunidades y riesgos que trae consigo esta tecnología. Eeaman ha seguido de cerca la aparición de la IA generativa y su adopción en la industria periodística a través de su boletín Wayfinder. La entrevista realizada por Henriksson fue publicada en la página web de WAN-IFRA a mediados de abril. 

En la conversación, Eeman contó que en Mediahuis ya estaban trabajando con IA desde hacía algún tiempo, pero a partir del anuncio del lanzamiento de la cuarta versión de Midjourney, un programa de inteligencia artificial con el cual sus usuarios pueden crear imágenes a partir de descripciones textuales, y la publicación de ChatGPT en noviembre del año pasado, todo empezó a cambiar. “De repente, cualquiera podía utilizar estas herramientas de forma accesible y fácil de usar, y se hizo evidente que esto no es solo para los científicos de datos y para las personas que trabajan en los backends técnicos”, le dijo Eeman a WAN-IFRA.

Para el especialista, los medios de información deberían prestarle atención a la IA pues el volumen de contenidos se disparará. Eeman afirma que esto podría alterar la cadena de valor de los medios. Especialmente en la distribución, en la búsqueda y también en la producción de información. 

“Como editor de noticias, podrías ahogarte en ese enorme volumen que se está generando. Así que tienes que preguntarse, ¿por qué la gente todavía vienen a su destino? ¿Por qué tus noticias siguen siendo distintivas? ¿Cómo te diferencias de todo lo que puede producir la IA?”, advierte el Director de Cambio de Mediahuis.

Eeman también opina que el internet tal y como lo conocemos podría cambiar a medida que crezca la popularidad de la IA. Su lógica es sencilla: si el Internet está basado en la búsqueda, pero ahora cualquiera podría encontrar las respuestas a lo que está buscando a través de un chat, ¿por qué tendrías que hacer clic en un enlace? 

En ese sentido, advierte que el Internet basado en enlaces es lo que impulsa a muchos medios y a todo el sistema de publicidad en línea, y actualmente muchas empresas del sector invierten en sus propios sitios web para captar el valor (datos de audiencia y monetización). “Pero si se interrumpe la búsqueda como fuente de tráfico, será mucho más difícil llevar ese tráfico a sus propios destinos. Sobre todo porque ChatGPT permite plugins que pueden extraer contenido en la interfaz de chat, en lugar de tener que ir a otra parte”, dijo Eeaman.

Por eso, recomienda explorar el potencial de la IA. ¿Por dónde empezar? Eeman opina que un camino es repensar el flujo de trabajo periodístico habitual, desde la planificación y el abastecimiento hasta la publicación. “Si quieres probar la IA, ve allí donde esté la oportunidad, donde pueda quitarte trabajo que actualmente te quita tiempo y energía que quieres invertir en otra cosa. Por ejemplo, transcripciones, adición de metadatos o adaptación de contenidos de un formato a otro. ¿Cuántos formatos diferentes de redes sociales tienes que crear? ¿Cuántos titulares diferentes hay que generar? Estas son algunas de las tareas en las que la IA puede ser un buen asistente, y tú puedes seguir teniendo la edición final para decidir qué se publica”.

Por ejemplo, el periodista cuenta que en Mediahuis, han pensado cómo usar la IA para ayudar a los periodistas a transcribir, producir textos, o adaptar contenidos.

Pero en un nivel más estratégico, recomienda revisar la cadena de valor. Es decir, revisar en qué parte la inteligencia artificial podría producir una verdadera disrupción. “Debes preguntarte, ¿por qué la gente seguiría acudiendo a tu destino? ¿Por qué tus noticias siguen siendo distintivas? ¿Cómo te diferencias de todo lo que puede producir la IA?”.

Para Eeman este tipo de preguntas son las que los directivos de la industria de medios se deberían estar haciendo en estos momentos. Para él, no es momento de tener miedo, sino de pensar estratégicamente. Incluso si esto conduce a explorar opciones como aliarse con OpenAI, la empresa creadora de Chat GPT, para desarrollar un plug-in. 

Eaman ve la inteligencia artificial como una oportunidad, y no una amenaza, para los medios. Para él, todo se trata de cómo los medios se quieran posicionar en este nuevo panorama. “¿Eres un proveedor de contenidos? ¿O quieres ofrecer algo más? Es diferente controlar toda la cadena de valor o ser sólo un proveedor. Y cuanto más controlas, mejor puedes monetizar. Si solo eres un proveedor, tu posición es débil”, adviritó.

Una empresa que está aprovechando el momento es Bloomberg, que acaba de lanzar Bloomberg GPT para aprovechar sus datos financieros. Para Eeman, este es un ejemplo de un jugador de la industria que está aprovechando su archivo y explorando las posibilidades de los motores de lenguaje artificial para mejorar su posición en el medio. 

Sin embargo, Eeman reconoce que no todos los medios tienen las capacidades de Bloomberg. Pero no descarta que medios más pequeños puedan acercarse a la inteligencia artificial y desarrollar sus propios chats. Advierte que desarrollar este tipo de software realmente es más sencillo de lo que parece. “Hay muchas herramientas en las que puedes introducir tus propios datos. Y necesitas un webmaster con un poco de conocimientos técnicos que sepa cómo conectar ciertos datos. Si tienes una base de datos de tus artículos y puedes conectarla a un GPT, puedes hacer que sea consultable y conversacional”, le dijo a WAN-IFRA.

La invitación del especialista es a dejar salir la curiosidad y atreverse a probar. “Es como el Lego inteligente. Solo se necesita utilizar los ladrillos adecuados. Ni siquiera necesitas ser programador, solo debes entender cómo trabajar con Lego”.

En cuanto a la parte editorial, recomienda poner límites. Por ejemplo, en Mediahuis, con la nueva ola de IA, lo primero que dijeron fue: “Tenemos que establecer directrices”. Estas directrices incluyen cosas como que siempre haya un humano en el bucle. “Sea lo que sea lo que publiques, el redactor jefe sigue siendo responsable. Y si se cometen errores, no se puede culpar a la máquina. También tenemos normas para no utilizar imágenes cuya fuente original desconozcamos, para no violar la propiedad intelectual”, explicó.

Esto, pues para nadie es un secreto que la inteligencia artificial acarrea peligros. Especialmente para los medios. “Sin confianza ni credibilidad, el negocio de las noticias está fuera de juego. Si la gente confía más en lo que le llega por ahí que en lo que le ofrece tu marca, no tienes nada en lo que apoyarte y tu modelo de negocio se va al traste”. Para él, que la desconfianza del público en los medios aumente por causa de la IA sería “un mal irreversible”. 

Por eso, Ezra Eeman insiste en que se hable más y de manera más estratégica sobre las posibilidades de la IA. “Me gusta mucho una cita de Steve Jobs que dice que los ordenadores son como una bicicleta para nuestras mentes. Es decir, con ellos puedes ir más rápido. Yo utilizo la IA de esa manera. Me gusta intercambiar ideas con ChatGPT, y también lo hago con Midjourney. Todos los días hago una pregunta al azar para ver con qué me sale. Me gusta ese diálogo. Estos programas son una especie de copiloto, en el que tú eres el dueño de la idea y eliges hasta dónde llevarla”. 

En últimas, su llamado es a reconocer las oportunidades que trae consigo esta tecnología y animarse a explorarlas. “A veces quieres rebotar una pelota contra la pared. Con la IA, la pared te devuelve algo más que un simple rebote. Puede que te devuelva 10 pelotas diferentes de distintos colores”, ilustró Eeman.